Orizaba, Ver.- En un documento en donde se abordan las condiciones intrafamiliares por las que se pasa en medio de la pandemia de covid-19, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) considera que “los cierres de escuelas y la restricción de movimiento han dejado a algunos niños atrapados en sus casas, en casos, con agresores estresados por la situación”.
“Los sistemas de protección a la infancia ya enfrentaban serias dificultades para responder frente a la violencia contra los niños y con la pandemia este problema se ha agudizado, atando de manos a quienes se encargan de protegerlos”.
“Durante el confinamiento es probable que se presenten con mayor frecuencia situaciones de violencia hacia niños, niñas y adolescentes o hacia otros miembros de la familia, como el castigo corporal, la desatención, la violencia sexual y psicológica”.
El documento aclara que la violencia puede prevenirse, y para ello, recomienda, “que los padres y cuidadores comprendan en mayor medida las conductas de sus hijos y establezcan una mejor comunicación con ellos. Con ello se podrán evitar las consecuencias que tiene una vida con violencia doméstica en el corto, mediano y largo plazo, y prevenir sus efectos adversos en el desarrollo de los niños”.
Por ello, “los niños, niñas y adolescentes aprenden conductas emocionales de los adultos significativos en sus vidas, por lo que la forma en que los adultos responden a una crisis tiene impacto en ellos. Es importante que como padre, madre o cuidador/a, aprendas a manejar tus emociones y mantengas la calma, que hables amablemente con tus hijos e hijas, demuestres empatía y les ayudes a comprender sus emociones”.
“Los momentos de estrés y ansiedad pueden afectar la comunicación con los niños, niñas y adolescentes en casa, por eso es importante buscar la mejor manera de comunicarnos con ellos, ten conversaciones con ellos todos los días, pregúntales cómo se sienten, qué hicieron o qué van a hacer, para que la comunicación se vuelva algo normal y sea fácil abordar temas más complejos”.
“Es importante estar al tanto de sus intereses, qué temas les gustan, qué música escuchan, qué grupos, influencers o artistas siguen; escucha lo que tengan que decir, no les interrumpas, respeta sus espacios y sus silencios. Genera un ambiente en el cual ellos sientan confianza para expresarse libremente”.
Otro asunto para tener especial cuidado es que, si bien, el aumento de la actividad en internet apoya el aprendizaje, la distracción y nuevas formas de socialización, también coloca a niños, niñas y adolescentes en mayores riesgos de ser víctimas de explotación sexual y ciberacoso; es necesario que las personas adultas tomen medidas para mitigar los riesgos, y lograr un equilibrio de los derechos de la niñez a la libertad de expresión y al acceso a la información.
“En estos momentos se hace especialmente importante formar a los niños, niñas y adolescentes para que tengan habilidades para usar internet de manera segura”, concluye el texto.
Fuente: La Jornada de Veracruz