Xico, Ver.- Don Pedro Mávil, un hombre de la tercera edad, junto con su familia, continúa, en pie de lucha para saber la verdad sobre el secuestro y posterior homicidio de su hija, Gemma.
Durante casi 10 años, los parientes y amigos de la joven oriunda de Xico, en Veracruz, siguen exigiendo a las autoridades la verdad entorno a lo ocurrido.
Gemma fue secuestrada en Xalapa el 3 de Mayo de 2011, su padre, el señor Pedro relató que durante casi una decada ha vivido varios episodios en los que aparecieron falsos indicios sobre el paradero de sus restos.
El primero de ellos fue en junio de 2016 cuando le notificaron que su hija habría sido inhumada con otros dos cuerpos en una fosa común, pero esta pista resultó falsa, pues no se trataba de Gemma.
Esto se repitió al menos en un par de ocasiones más en fosas localizadas en el Panteón de Palo Verde en la capital del estado de Veracruz.
A casi una década de lo ocurrido Pedro Mávil considera que ha sido una víctima de la impunidad donde las propias instituciones en las que ha depositado su confianza no avanzan en la investigación para saber qué pasó con su hija.
“La politiica interviene en el tema de la Procuración de Justicia, porque lo hemos vivido, ahí esta el ejemplo de Duarte con la asignación del Fiscal a modo, tenemos la administración de Miguel Ángel Yunes Linares con la asignación de un fiscal a modo, y sr sigue dando y eso no va a acabar desgraciadamente, aunque digamos que estamos viviendo un cambio, no es real la situación, es meramente una demagogia decir que hay verdaderamente cambios, quizás lo haya en acciones y en áreas administrativas, más no en la impartición y procuración de justicia”.
La carpeta de investigación por el caso de Gemma continúa abierta en la Fiscalía General del Estado, sin embargo, Don Pedro considera que no hay interés de las autoridades en ofrecer justicia a las cientos de familias que están en su misma situación.
El tiempo avanza y ahora solo le pide a Dios fuerzas para poder cumplir la promesa que le hizo a su hija: inhumarla y tenerla en un lugar a donde llorarle y llevarle flores.
“La fe la tengo bien puesta en Dios, de que algún día, antes de que me llame a cuentas, sabré dónde pueda encontrar los restos de mi hija, dar con su paradero”.
Gemma fue secuestrada a los 29 años de edad, este 2020 cumpliría 38, al interior del que fuera su hogar, localizado en una tranquila calle del centro de Xico en la zona montañosa de Veracruz, don Pedro Manuel Mávil Martínez, aun conserva las fichas de búsqueda con la fotografía de su Gemma, su hija a quien secuestraron y asesinaron en 2011.
