La coalición Estatal LGBTTI+ alerta sobre terapias de reconversión hormonal en niños, que en Xalapa ya se están llevando a cabo.
Benjamin Callejas Hernández, presidente de la agrupacion informó que se tiene conocimiento de tres casos en esta ciudad, en su mayoría varones.
En entrevista, recordó que en el Estado de México el Congreso aprobó sancionar las terapias de reconversión hasta con 3 años de carcel y la semana pasada, el Senado dictaminó que las terapias quedan prohibidas totalmente.
Explicó que los casos detectados son en niños de 8 a 9 años de edad, provenientes de familias de “renombre” en la capital veracruzana.
El Presidente de la Coalición Estatal LGBTTI+, informó que estos casos se dan cuando los padres detectan conductas muy marcadas en la expresión de género de los menores, y para tratar de “corregirlo”, los llevan con endocrinólogos para que les suministren hormonas masculinas.
Benjamín Callejas Hernández, comentó también que les han reportado casos de niñas que son llevadas con ginecólogos para ser “hormonadas”.
“Ahí es donde vemos que la homofobia se da más en varones, en niñas es un poco más permisivo, sin embargo no deja de ser violencia”.
Callejas Hernández refirió que en su mayoría, estás terapias de reconversión hormonal han ocurrido en varones, sin embargo.
El activista de la diversidad sexual, Callejas Hernández dijo que en Xalapa, estás prácticas se han llevado más allá de la violencia psicóloca por tratar de “revertir” la homosexualidad y lamentó que los padres no piensan en los riesgos de salud que pueden provocar a sus hijos.
“Lo que puedo decir aquí en Xalapa, tenemos el conocimiento de que sí se han dado terapias de reconversion pero no de la manera que se hacian en la cuidad de México, Monterrey o Guadalajara”.
Aunado a lo anterior, el entrevistado dijo que otra de las prácticas comunes en las familias de “abolengo”, es mandar a sus hijos a hacer servicio en los conventos o monasterios, donde las religiones trataban de “corregir” por medio del uso de la palabra de la fe, lo que consideraban “era un castigo divino”.
Callejas Hernández detalló que, estos casos ya han sido canalizados al programa municipal de atención a la poblacion de diversidad sexual, en donde se le ha dado asesoria psicológica y acompañamiento.
