EU/Debate. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos ha revelado que el 2020 será un año con alta prevalencia de casos de mielitis flácida aguda, una enfermedad neurológica poco común pero grave que afecta principalmente a los niños con un estado paralizante.
Desde el 2014 se han registrado cifras altas en los Estados Unidos cada dos años entre los meses de agosto y noviembre. Los enterovirus, y especialmente el enterovirus-D68 (EV-D68), son probablemente los responsables de estas altas cifras de casos.
Los CDC informan que no saben qué es lo que causa la enfermedad, una mielitis flácida aguda (AFM), la que afecta al sistema nervioso y desencadena debilidad e incluso parálisis en una o más extremidades. Los casos de esta condición aumentaron cada dos años en Estados Unidos desde 2014, afectando a más estadounidenses con cada brote.
La mielitis flácida aguda puede agravarse rápidamente en el transcurso de unas horas o días y causar parálisis permanente o complicaciones de insuficiencia respiratoria potencialmente mortales en pacientes previamente sanos, o sea que los retrasos en la atención médica pueden ser graves.
Los padres y médicos deberían presumir la MFA en los pacientes que de manera repentina presenten debilidad en las extremidades, especialmente durante los meses de agosto a noviembre. Una enfermedad respiratoria o fiebre recientes y la presencia de dolor en el cuello o la espalda, o cualquier síntoma neurológico, deberían aumentar su preocupación.
Los pediatras y proveedores de atención médica de primera línea en las salas de emergencias y los centros de atención médica de urgencias deben estar preparados para identificar rápidamente los síntomas de la MFA y hospitalizar a los pacientes de inmediato. La atención oportuna es crucial en cada paso: la pronta identificación de la MFA lleva a un manejo médico óptimo y permite la recolección temprana de muestras.
Cuando los proveedores de atención médica identifican los síntomas tan pronto como sea posible, hay mejores probabilidades de detectar la causa de la MFA, lo cual podría ayudar a pronosticar el resultado. Otras pruebas de laboratorio y una imagen de resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés) del cerebro y la médula espinal pueden diferenciar la MFA de otras afecciones con debilidad de las extremidades.
Robert Redfield, M.D., director de los CDC dijo que “A medida que entramos en estos críticos próximos meses, los CDC están tomando las medidas necesarias para ayudar a los médicos a identificar mejor los signos y síntomas de la MFA en los niños”, dijo el director de los CDC, Robert Redfield, M.D.
“La identificación y el diagnóstico temprano son cruciales. Los CDC y colaboradores de salud pública han reforzado los sistemas de detección temprana de enfermedades, un paso vital hacia el rápido tratamiento y la rehabilitación de los niños con MFA”, agregó.
